Concebido como un lugar de vacaciones muy cerca a la ciudad Lima capital de Perú, esta cabaña de madera se emplaza en un terreno plano junto al rio de Mala. En el fondo de un valle rodeado de cerros con bosques de parras de uva, manzana y otras especies de frutas, con vistas lejanas al mar.
Esta casa de camp se diseñó propiciando el encuentro, la vida social y la contemplación del paisaje. A través de un gran espacio central de doble orientación (norte y sur), donde se dispusieron estar, comedor y cocina.
Cada ala contiene un dormitorio y un baño. La planta de barra alargada y la sección a dos aguas permitieron resolver aspectos programáticos y climáticos. Tales como conseguir una gran luz y altura en el espacio central o evacuar correctamente la lluvia durante el invierno.
La facha frontal, con seis hojas de mamparas de madera que permite abrirse o cerrarse gradualmente en sus caras principales. Controlando el ingreso de sol y calor hasta dejar la casa completamente cerrada cuando no está siendo habitada, como una silueta rotunda en el paisaje.
